Unos 17 mil niños y niñas de todo el país participarán en el programa ambiental-educativo Juegos Ecológicos 2010, indicó el director general sectorial de Parques de Recreación, Jhon Ribas.
Dicho programa -que arrancará el próximo 3 de agosto- estará enfocado a fortalecer los hábitos de conservación en materia de ahorro y uso adecuado de la energía y del agua, así como también la importancia de la reforestación y el cuidado de los bosques.
“Este año el programa estará dirigida a fomentar la conciencia ambiental sobre el ahorro energético y la conservación del agua. El programa educativo sumará alrededor de 17 mil niños y niñas, con edades comprendidas entre los 4 y 12 años”, dijo.
Los Juegos Ecológicos es un plan vacacional que adelanta desde hace 31 años el Instituto Nacional de Parques (Inparques), ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para el Ambiente (Minamb), donde se utiliza el juego como instrumento de enseñanza y aprendizaje ambiental, con una formación ecológica, favorable para la conservación de nuestros parques nacionales, monumentos naturales y parques de recreación.
Los Juegos Ecológicos se iniciaron en 1979 en el Parque Generalísimo Francisco de Miranda, antiguo Parque del Este, como un programa vacacional que combinaba actividades artísticas, deportivas y de contacto con la naturaleza, donde participaron 50 niños de 6 a 12 años de edad.
Fue exitoso desde sus inicios por ser el único con un formato de cuatro semanas, capaz de cumplir sus objetivos educativos, manteniendo el interés y la diversión de los participantes.
En 1982 se extendió a las principales ciudades del país y en 1993 participaron cuatro mil niños y jóvenes y en 1994 se llevó al resto de los estados.
En el año 2008 -gracias a las políticas de inclusión del Gobierno Nacional- 15 mil niños integraron este programa y se incluyó a la población infantil de las comunidades indígenas y de las zonas rurales, con el apoyo de los consejos comunales.
El programa persigue que los participantes logren conocer y comprender los elementos e interrelaciones de su ambiente; reconocer como guía de su comportamiento los siguientes valores: el humanismo, el aprecio a la vida, el amor, la igualdad, la solidaridad y la cooperación y desarrollar habilidades y destrezas que les permitan participar activamente en la solución de los problemas ambientales.
Dicho programa -que arrancará el próximo 3 de agosto- estará enfocado a fortalecer los hábitos de conservación en materia de ahorro y uso adecuado de la energía y del agua, así como también la importancia de la reforestación y el cuidado de los bosques.
“Este año el programa estará dirigida a fomentar la conciencia ambiental sobre el ahorro energético y la conservación del agua. El programa educativo sumará alrededor de 17 mil niños y niñas, con edades comprendidas entre los 4 y 12 años”, dijo.
Los Juegos Ecológicos es un plan vacacional que adelanta desde hace 31 años el Instituto Nacional de Parques (Inparques), ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para el Ambiente (Minamb), donde se utiliza el juego como instrumento de enseñanza y aprendizaje ambiental, con una formación ecológica, favorable para la conservación de nuestros parques nacionales, monumentos naturales y parques de recreación.
Los Juegos Ecológicos se iniciaron en 1979 en el Parque Generalísimo Francisco de Miranda, antiguo Parque del Este, como un programa vacacional que combinaba actividades artísticas, deportivas y de contacto con la naturaleza, donde participaron 50 niños de 6 a 12 años de edad.
Fue exitoso desde sus inicios por ser el único con un formato de cuatro semanas, capaz de cumplir sus objetivos educativos, manteniendo el interés y la diversión de los participantes.
En 1982 se extendió a las principales ciudades del país y en 1993 participaron cuatro mil niños y jóvenes y en 1994 se llevó al resto de los estados.
En el año 2008 -gracias a las políticas de inclusión del Gobierno Nacional- 15 mil niños integraron este programa y se incluyó a la población infantil de las comunidades indígenas y de las zonas rurales, con el apoyo de los consejos comunales.
El programa persigue que los participantes logren conocer y comprender los elementos e interrelaciones de su ambiente; reconocer como guía de su comportamiento los siguientes valores: el humanismo, el aprecio a la vida, el amor, la igualdad, la solidaridad y la cooperación y desarrollar habilidades y destrezas que les permitan participar activamente en la solución de los problemas ambientales.
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