Redacta: Lic. Berenice Sulbaran
Seguramente muchos de los que leen estas líneas en este momento se declaran, al igual que yo, amantes de la playa. Son de esos que esperan desesperadamente los fines de semana, vacaciones y puentes para salir corriendo a la playitaaaaa!!! sin importar el medio de transporte utilizado ya sea en carro, moto, bus o en cola. Esos que cuentan los días y las horas para poder volver a sentir la arena en sus pies, escuchar el sonido de las olas, entrar al mar, sumergirse, nadar, surfear, flotar…en fin…dicho a lo venezolano: tripear!!!
Pero también habrá muchos que así como la adoran, así mismo la destruyen, desvalorizando la gran importancia que tienen tanto para nosotros, como para el planeta y para el resto de las especies que viven en ella. Esos que van por la carretera arrojando botellas, bolsitas de chucherias, servilletas, y todo tipo de desperdicio y que una vez instalados en la playa lo siguen haciendo dejando una huella de contaminación gigante a su partida.
Y es que no se trata sólo de los que van a la playa por temporadas sino también de sus habitantes (“los locales”, como se le dice comúnmente). Ellos mismos, “los locales”, personas que nacieron en los pueblos costeros y cuya economía deriva directamente de la playa, son los PRIMEROS en ensuciar, descontroladamente, todo su entorno. Y no es por generalizar, obviamente habrá sus excepciones, pero en su mayoría ninguno posee una cultura conservacionista. Entonces no les importa que un “turista” arroje basura en áreas naturales protegidas, llene la arena de gasolina con su 4x4, contamine la playa haciendo fogatas, arroje botellas y desperdicios por todas partes, etc. La respuesta: ellos también lo hacen y en ultima instancia podrás escuharlos decir que no importa porque luego alguien pasara a “limpiar”, limpieza que no consiste en otra cosa más que aglomerar la basura y escombros en un espacio donde no se vea o no se note tanto, el cual generalmente es la parte de atrás de la playa… el fondo… algo como el patio de la casa (Ejemplo: Playa Grande en Choroni o Bahia de Cata en Ocumare).
Si no cuidamos lo que tenemos lo perderemos. Nosotros los visitantes no tendremos más playas hermosas donde vacacionar y ustedes los locales no tendrán donde pescar, vender sus productos y ofrecer sus servicios…
Conciencia ecológica! Eso es lo único que hace falta!
Seguramente muchos de los que leen estas líneas en este momento se declaran, al igual que yo, amantes de la playa. Son de esos que esperan desesperadamente los fines de semana, vacaciones y puentes para salir corriendo a la playitaaaaa!!! sin importar el medio de transporte utilizado ya sea en carro, moto, bus o en cola. Esos que cuentan los días y las horas para poder volver a sentir la arena en sus pies, escuchar el sonido de las olas, entrar al mar, sumergirse, nadar, surfear, flotar…en fin…dicho a lo venezolano: tripear!!!
Pero también habrá muchos que así como la adoran, así mismo la destruyen, desvalorizando la gran importancia que tienen tanto para nosotros, como para el planeta y para el resto de las especies que viven en ella. Esos que van por la carretera arrojando botellas, bolsitas de chucherias, servilletas, y todo tipo de desperdicio y que una vez instalados en la playa lo siguen haciendo dejando una huella de contaminación gigante a su partida.
Y es que no se trata sólo de los que van a la playa por temporadas sino también de sus habitantes (“los locales”, como se le dice comúnmente). Ellos mismos, “los locales”, personas que nacieron en los pueblos costeros y cuya economía deriva directamente de la playa, son los PRIMEROS en ensuciar, descontroladamente, todo su entorno. Y no es por generalizar, obviamente habrá sus excepciones, pero en su mayoría ninguno posee una cultura conservacionista. Entonces no les importa que un “turista” arroje basura en áreas naturales protegidas, llene la arena de gasolina con su 4x4, contamine la playa haciendo fogatas, arroje botellas y desperdicios por todas partes, etc. La respuesta: ellos también lo hacen y en ultima instancia podrás escuharlos decir que no importa porque luego alguien pasara a “limpiar”, limpieza que no consiste en otra cosa más que aglomerar la basura y escombros en un espacio donde no se vea o no se note tanto, el cual generalmente es la parte de atrás de la playa… el fondo… algo como el patio de la casa (Ejemplo: Playa Grande en Choroni o Bahia de Cata en Ocumare).
Si no cuidamos lo que tenemos lo perderemos. Nosotros los visitantes no tendremos más playas hermosas donde vacacionar y ustedes los locales no tendrán donde pescar, vender sus productos y ofrecer sus servicios…
Conciencia ecológica! Eso es lo único que hace falta!
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